lunes, 4 de marzo de 2013

Palabras de lluvia...


"Puedes negarme tus lágrimas pero la lluvia llegará y me prestará las suyas".


Llueve, llueve, llueve, y me preguntas por qué sólo escribo los días de lluvia, te miro con curiosidad y sonrío, me extraña que no sepas leer en mi la razón, escribo para no perderme en mi,en ti, en tantas cosas, para encontrarme cuando no sé ni dónde fui ni dónde iré, para inventar pretextos para seguir mirando hacia adelante y para conservar la poca cordura que aún me queda, para olvidar, sí, no me mires así, también escribe uno para olvidar lo que se sabe con certeza que sin embargo nunca se podrá olvidar, porque algunos recuerdos son persistentes y se aferran a su efímera vida como si les fuera la vida en ello, escribo también y sobre todo porque la escritura me da vida, porque cada palabra que cobra vida en el papel me concede un minuto más de ilusión, de esperanza, de risas, necesito escribir cuando llueve porque así hago tiempo hasta que lleguen esos amaneceres sin lluvia que tanto ansío (en uno de ellos te encontré un día y ahora no sé vivir sin ellos y sin ti), esos en que tejemos nuestra historia, nuestro ayer, nuestro hoy y ¿por qué no? también nuestro mañana, no olvides nunca que después de la lluvia siempre llega el arcoiris, te espero en ese amanecer donde tu sonrisa siempre me salva ("si te quiero es porque sos mi amor, mi cómplice y todo")...

jueves, 21 de febrero de 2013

SONRISAS DE PAPEL

SONRISAS DE PAPEL

Una vez comprendí que mi voz no era mía,
que era toda del mundo, del mar y los días.

Y la llevé en mi viaje entre amores y horror
y canté noche a noche aunque nadie me vio.
Cuando me iba solo arrastrando los pies
para llegar tan tarde a mi casa otra vez,
dejando atrás sonrisas, sonrisas de papel.

Y la filosofía fue un tema de a diario.
La que aprende cualquier trovador solitario.

Y pensé en los contrastes malditos que hay
entre un viaje al espacio y un niño sin pan.
Y hace tiempo dejé de arrastrarme los pies
pero siguió pasando la vida después
con sus sonrisas, sonrisas de papel.

Una vez tuve frío de todas las cosas;
de un amor, de un juguete, de una vieja rosa.

Y apuré mi carrera entre objetos así
y seguro ninguno se acuerda de mI.
Y se sigue escuchando el silbido de un tren
y el mundo está en harapos, lo veo también.
Con sus mismas sonrisas, sonrisas de papel.


(Silvio Rodriguez)

Sigo buscando entre el cansancio de los días, entre la bruma de tus silencios, entre los brazos de un hasta luego incierto, en la distancia de esas miradas sin besos tus sonrisas de papel, esas que me regalabas sin ninguna razón aparente, sencillamente porque estaba allí contigo y te daba la gana, porque siempre seguirás siendo tú aunque a ratos te mire y no te reconozca en esos vacíos tuyos que uno nunca sabe cuándo durarán...

Y sigo pintando sonrisas de papel para que las tomes prestadas, pero sólo hasta que encuentres las tuyas, tienes que prometerlo, las quiero de vuelta porque sé que antes o después volverán esas que perdiste o dejaste olvidadas quién sabe dónde, volverán y volverás a ser la que fuiste siempre, tú, mi refugio, mi guía, mi todo, te quiero a mi lado porque sin ti me falta el aire que respiro, la luz, la esperanza...

Te esperaré (a ti y a tus sonrisas) al filo de una canción de Silvio o Pablo, en ese rincón donde siempre supiste hacerme ver que la vida esconde siempre mucho más de lo que insinua, la magia reside en querer (y saber) descubrirla, un abrazo de oso y todas las sonrisas que necesites, te quiero...

viernes, 15 de febrero de 2013

LIBROS QUE ABRIGAN

"Si no sueñas nunca encontrarás lo que hay más allá de tus sueños".


Chicas, perdonad que me haya dispersado un poco (demasiado más bien, seis meses, cómo pasa el tiempo) entre novedades, devoluciones, y campañas, pese a mi caos existencial, ya sabéis que siempre os tengo presentes (artista, ya estoy dándole vueltas a la próxima recomendación, no me he olvidado), cada vez que un buen libro cae en mis manos me pregunto qué diría Ame o si le gustaría a Conchi o a mi artista, y sí, rubia trianera, no se me ha pasado, tu sorpresa navideña sigue pendiente para la próxima vez que nos veamos, a ver a ver, ya sé que mis lecturas a veces son muy variadas (y pelín originales) y que no a todas os gustarán pero bueno yo os dejo aquí la lista y ya vosotras me decís: Círculo de amigos de Maeve Binchy (vale, la leí después de ver la película y aunque la película no estaba mal, el libro es mucho mejor); para que no digais que me estoy volviendo muy moña añado el Prisionero del cielo de Carlos Ruiz Zafón (el segundo no me gustó, ¿será porque se repetía mucho? pero éste recupera la esencia más auténtica de La sombra del viento y ahí reside su magia) por volver a llevarme de la mano al cementerio de los libros olvidados; La luz en casa de los demás de Chiara Gamberale porque siempre es hermoso encontrar y construirse la propia mirada a través de las distintas miradas de los demás, en cada página me ha encantado cruzarme con la mirada de Mandorla y crecer con ella, pasar de piso en piso, de vecino a vecino y ver cómo trataba de seguir siendo ella misma sin perderse en las miradas de los demás; Sin entrañas de Maruja Torres (a algunas creo que ya os recomendé la primera aventura de la reportera con alma de detective Diana Dial, Fácil de matar) porque una vez que lees algo de ella ya no puedes parar, empecé por sus artículos en distintos periódicos y revistas y de ahí pasé a sus reportajes sobre Beirut, leer a Maruja es como vivir sus libros en primera persona, te invitan a viajar con ella allá donde te quiera llevar, esta vez nos lleva de crucero por el Nilo, lo dicho, ¡feliz viaje y feliz lectura!